UBICÓ LA POLICÍA A MÉNDEZ OVALLE

Al comunicarse con sus padres

UBICÓ LA POLICÍA A MÉNDEZ OVALLE

·          Su búsqueda parecía caer en el olvido

·          Declaró ser oriundo del Estado de México

·          Este martes, el juez Séptimo Penal determinará si le dicta auto de formal prisión

·          Con lo cual se iniciaría su proceso por feminicidio

Por Ignacio Arellano Mora

Javier Méndez Ovalle, el estudiante “modelo”, fue acusado de asesinar una adolecente y presuntamente descuartizarla en un departamento del edificio “Presidente Juárez”, de la segunda sección de Tlatelolco, en 2013, solicitó tiempo al Juez Séptimo Penal para presentar pruebas y no ser sometido a juicio. Escondido en el Estado de Querétaro, Javier Méndez mantenía comunicación con sus padres, mientras se mantuvo prófugo por el asesinato de Sandra, adolescente de 17 años. Este contacto familiar se fortaleció mientras su búsqueda parecía caer en el olvido.

Al principio, las llamadas entre padres e hijo eran esporádicas, pero fueron en aumento conforme al paso de los días y al notar ya no se hablaba del homicidio de la joven de 17 años. Según la averiguación previa CUH-1/T3/1033/13-06, las conversaciones se hicieron más frecuentes. Fue en tres de esas llamadas, realizadas a principios de julio, cuando agentes de la Procuraduría del DF -adscritos a la Fiscalía Desconcentrada en Cuauhtémoc - detectaron al joven y decidieron ir tras él. Por ello, los elementos policiacos montaron guardias en los puntos desde donde se realizó la comunicación telefónica y, en el momento vieron pasar a Javier, este fue detenido. NO OPUSO RESISTENCIA El presunto homicida de Tlatelolco ya era buscado en distintas partes del país y al parecer los judiciales que lo aprehendieron ya lo tenían ubicado. En un operativo tranquilo, sólo preguntaron en algunos de los negocios aledaños, la ubicación exacta de “La Finca” y de inmediato se lo llevaron. “Vimos llegar a varios hombres y como si lo conocieran lo abrazaron y lo subieron a un vehículo, preguntamos por qué se lo llevaban y sólo mencionaron su detención era por homicidio”. Javier Méndez Ovalle o “Carlos Medina Martínez” - como se hacía llamar el homicida de una joven- no opuso resistencia y de manera pacífica se condujo con los agentes judiciales del Distrito Federal, quienes lo aprehendieron al filo de la media noche, cuando se encontraba laborando en el café “La Finca”, de la cadena "Finca Santa Veracruz"; empleo conseguido mediante una identidad falsa, en la ciudad de San Juan del Río, Querétaro. “La Finca”, es un famoso café porque se encuentra en plena avenida Juárez, en el centro de la ciudad. Ahí se reúnen intelectuales, periodistas, estudiantes, turistas y lectores de periódicos. De acuerdo a un trabajador del mismo negocio, la captura del sujeto, se mantenía en esta entidad con una doble identidad, pudo haberse derivado de “un pitazo” de uno de sus amigos, con el que se presume mantenía comunicación. Los compañeros de trabajo de Méndez Ovalle manifestaron que el joven declaró ser oriundo del Estado de México y costeaba su carrera de ingeniería mediante el empleo. “Era un joven muy tranquilo, respetuoso y siempre se mantenía trabajando, muy atento a los clientes, sabíamos que vivía con una de sus amigas”, indicó. Antes de remitirlo al reclusorio Norte, fue descrito por quienes conversaron con él, como una persona de buenos modales. Empleaba términos “muy correctos” y siempre solicitaba las cosas “por favor”. Asimismo, de agradecer, “muy diferente a la mayoría de los homicidas detenidos aquí”, reconoció un agente. En mayo, llegó a trabajar en el restaurante, algunos clientes asiduos refieren por lo menos tenía más de un año de laborar en el negocio. “Traía papeles lo identificaban como Carlos Medina, pero ahora sabemos eran apócrifos”, refirió uno de sus compañeros de trabajo. La noticia de su captura y delito cometido, sorprendió a la mayoría de los ciudadanos y sobre todo a los clientes atendidos por él; quienes lo califican como un joven atento y muy servicial. Este caso alertó a las autoridades y a las cámaras empresariales, de la localidad, determinan “con esta experiencia” asumir mayor atención en la contratación de trabajadores, sobre todo cuando se trate de personas provenientes de otras entidades, porque existe la posibilidad se presenten con doble identidad y documentación falsa. La recomendación se hizo al comercio establecido, sector vulnerable a este tipo situaciones, por lo general, hacen contrataciones sin corroborar la documentación y no solicitan Carta de Antecedentes No Penales a los buscadores de empleo. De esta manera, tanto la parte patronal, como los propios asistentes al negocio, se han mostrado sorprendidos al saber -del “mesero atento”- se ocultaba aquí, luego de haber cometido un horrendo crimen.

Al principio, las llamadas entre padres e hijo eran esporádicas, pero fueron en aumento conforme al paso de los días y al notar ya no se hablaba del homicidio de la joven de 17 años. Según la averiguación previa CUH-1/T3/1033/13-06, las conversaciones se hicieron más frecuentes. Fue en tres de esas llamadas, realizadas a principios de julio, cuando agentes de la Procuraduría del DF -adscritos a la Fiscalía Desconcentrada en Cuauhtémoc - detectaron al joven y decidieron ir tras él. Por ello, los elementos policiacos montaron guardias en los puntos desde donde se realizó la comunicación telefónica y, en el momento vieron pasar a Javier, este fue detenido. NO OPUSO RESISTENCIA El presunto homicida de Tlatelolco ya era buscado en distintas partes del país y al parecer los judiciales que lo aprehendieron ya lo tenían ubicado. En un operativo tranquilo, sólo preguntaron en algunos de los negocios aledaños, la ubicación exacta de “La Finca” y de inmediato se lo llevaron. “Vimos llegar a varios hombres y como si lo conocieran lo abrazaron y lo subieron a un vehículo, preguntamos por qué se lo llevaban y sólo mencionaron su detención era por homicidio”. Javier Méndez Ovalle o “Carlos Medina Martínez” - como se hacía llamar el homicida de una joven- no opuso resistencia y de manera pacífica se condujo con los agentes judiciales del Distrito Federal, quienes lo aprehendieron al filo de la media noche, cuando se encontraba laborando en el café “La Finca”, de la cadena "Finca Santa Veracruz"; empleo conseguido mediante una identidad falsa, en la ciudad de San Juan del Río, Querétaro. “La Finca”, es un famoso café porque se encuentra en plena avenida Juárez, en el centro de la ciudad. Ahí se reúnen intelectuales, periodistas, estudiantes, turistas y lectores de periódicos. De acuerdo a un trabajador del mismo negocio, la captura del sujeto, se mantenía en esta entidad con una doble identidad, pudo haberse derivado de “un pitazo” de uno de sus amigos, con el que se presume mantenía comunicación. Los compañeros de trabajo de Méndez Ovalle manifestaron que el joven declaró ser oriundo del Estado de México y costeaba su carrera de ingeniería mediante el empleo. “Era un joven muy tranquilo, respetuoso y siempre se mantenía trabajando, muy atento a los clientes, sabíamos que vivía con una de sus amigas”, indicó. Antes de remitirlo al reclusorio Norte, fue descrito por quienes conversaron con él, como una persona de buenos modales. Empleaba términos “muy correctos” y siempre solicitaba las cosas “por favor”. Asimismo, de agradecer, “muy diferente a la mayoría de los homicidas detenidos aquí”, reconoció un agente. En mayo, llegó a trabajar en el restaurante, algunos clientes asiduos refieren por lo menos tenía más de un año de laborar en el negocio. “Traía papeles lo identificaban como Carlos Medina, pero ahora sabemos eran apócrifos”, refirió uno de sus compañeros de trabajo. La noticia de su captura y delito cometido, sorprendió a la mayoría de los ciudadanos y sobre todo a los clientes atendidos por él; quienes lo califican como un joven atento y muy servicial. Este caso alertó a las autoridades y a las cámaras empresariales, de la localidad, determinan “con esta experiencia” asumir mayor atención en la contratación de trabajadores, sobre todo cuando se trate de personas provenientes de otras entidades, porque existe la posibilidad se presenten con doble identidad y documentación falsa. La recomendación se hizo al comercio establecido, sector vulnerable a este tipo situaciones, por lo general, hacen contrataciones sin corroborar la documentación y no solicitan Carta de Antecedentes No Penales a los buscadores de empleo. De esta manera, tanto la parte patronal, como los propios asistentes al negocio, se han mostrado sorprendidos al saber -del “mesero atento”- se ocultaba aquí, luego de haber cometido un horrendo crimen.

ASUMIÓ SU RESPONSABILIDAD Presentado ante el Ministerio Público, Javier asumió su responsabilidad en el asesinato, el móvil fue por no creerle Sandra -la víctima- acerca de que él era alumno de excelencia y de su próximo viaje al continente europeo para estudiar en Alemania. El presunto se consideraba genio por haber ganado una Olimpiada de Física, ofreció por medio de su abogado, la declaración de sus padres para evitar que el Juez dicte auto de formal prisión por presuntamente asesinar a Sandra Camacho. De comprobarse su culpabilidad, Méndez Ovalle podría pasar hasta 60 años en prisión, será este martes 5 de agosto cuando el impartidor de justicia decida si el ex alumno del Instituto Politécnico Nacional (IPN) es procesado por el delito de feminicidio. Este sábado, el acusado se presentó en la rejilla de prácticas del Reclusorio Norte y rindió su declaración preparatoria. SE CITARON El 27 de junio de 2013, los jóvenes se citaron en la estación del Metro Tlatelolco. De ahí fueron al cine en Plaza Universidad. A su regreso, decidieron ir donde él vivía solo; en el piso 10, de la entrada “D”, del edificio “Presidente Juárez”, en Tlatelolco. Ambos se conocieron 15 días antes por Facebook, él le mintió diciendo ser un agente promotor de edecanes. El expediente señala que tuvieron relaciones sexuales y fue cuando el estudiante de física le contó sus planes, y en ese momento se registró el homicidio, pues la mujer se burló de él. “con el propósito de evitar pidiera auxilio, el inculpado decidió asfixiarla. Una vez consumado el feminicidio y con la finalidad de deshacerse del cuerpo procedió a seccionarlo mediante el empleo de un cuchillo de cocina”. “Luego depositó los restos mortales en contenedores de basura instalados en las inmediaciones del lugar de los hechos", indica el expediente. SE MOLESTÓ Y LA ASFIXIÓ De acuerdo con los datos recabados por la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal, PGJDF, Méndez Ovalle conoció a la víctima en Facebook; Sandra “N” no le creyó lo de genio en la Física y de la obtención de una beca para estudiar en Europa, además se burló y debido a esto él se enfureció y comenzaron a discutir, la golpeó y la asfixió. Después, la descuartizó, según se indica en la averiguación previa CUH-1/T3/1033/13-06. El joven fue detenido el lunes 28 de julio, en el Estado de Querétaro, e internado el jueves 31 en el Reclusorio Norte; donde se encuentra en el área de Ingreso, para someterse a los estudios sicológicos correspondientes. En 2012, el estudiante del IPN obtuvo la medalla de bronce en las Olimpiadas de Física en Estonia, incluso fue felicitado por autoridades federales del País por su logro. La Procuraduría del DF informó: Méndez Ovalle fue detenido el lunes pasado en San Juan del Río, Querétaro, donde trabajaba como mesero en un restaurante, pues tenía una identidad nueva y vivía con una amiga. SE FUE CON SUS PADRES Al respecto, el procurador del DF, Rodolfo Ríos, informó: después el joven regresó al departamento para limpiar las manchas de sangre. Pasó la noche ahí y al día siguiente se fue con sus padres a Tecamac, Estado de México. En tanto -comentó el funcionario- el padre de Javier Méndez Ovalle le llamó por teléfono para preguntarle lo sucedido, pues la Policía lo estaba entrevistando, por esta razón el estudiante escapó a Querétaro. “El imputado fue ingresado al Reclusorio Norte, a disposición del Juez Séptimo Penal, quien calificó de legal la detención y en el término constitucional se determinará su situación jurídica por el delito de feminicidio", indicó el procurador de la Ciudad de México. EL CASTIGO El crimen de Méndez Ovalle tiene todas las características de un feminicidio, pues estranguló a su víctima, la descuartizó, hay lesiones, exposición del cuerpo en vía pública, violencia evidente y previamente la acosó por medio de la red social Facebook. Cabe resaltar el delito de feminicidio está contemplado en el Código Penal del Distrito Federal. En el artículo 148 Bis se indica el feminicidio ocurre cuando por razones de género se priva de la vida a una mujer. La norma menciona, de esta transgresión, se concreta al comprobarse signos de violencia sexual contra la víctima, como lesiones infamantes, degradantes o mutilaciones, ya sean previas o posteriores a la privación de la vida. Por ello, la pena puede ir de los 20 a 60 años de cárcel. “El rostro presenta golpes así como moretones, el tronco presenta varios piquetes, los cortes son finos, el cuello presenta un surco…”, describió el policía que encontró parte del cuerpo de Sandra, revela el expediente CUH-1/T3/1033/13-06. FAN DE CHOPIN Y SERIES DE COMEDIA En el perfil de Facebook, Javier Méndez tiene cerca de 50 fotografías de los viajes realizados para sus torneos académicos. En casi todas ellas aparece sonriendo y con compañeros de competencia de México y otros países. Méndez Ovalle, es fan de la música de Chopin y de la película “Forrest Gump”. Asimismo, es lector de los libros “El Código Da Vinci”, “Ángeles y Demonios” y “El mundo de Sofía”. El joven estudiante no frecuenta la televisión, pero cuando lo hacía, sintonizaba la series “Malcom el de en medio” y “Friends” Tras, sus pasos, en cierta ocasión la policía supo de Javier. Un par de agentes corrieron tras él por las calles de Otumba, Estado de México, sin lograr su detención.